Descripción
Antes del embarazo cuando preparabamos todas las cosas para la llegada de Èlia, estuvimos valorando el tema baño y nos decantamos por las bañeras anticólicos para los primeros meses, había leído y visto mucho sobre ellas, pero no tenía ni idea como saldría la experiencia.
Hoy con casi 4 meses de práctica os puedo contar mi experiencia con este producto.
Durante el embarazo el bebé esta abrazado por las paredes de nuestro útero, flotando dulce y cómodamente en un líquido amniótico calentito, son 9 meses de confort y seguridad en el vientre de mamá.
Las bañeras anticólicos simulan este estado en la vida extrauterina, existen dos en el mercado, al menos en España nosotros encontramos dos marcas que se comercializan: Tummy Tub y Shantala.
Son muy similares, no obstante nosotros preferimos optar por la Tummy Tub ya que al ser un poquito más alta y más cerrada se nos asemejaba más a la situación en el útero materno y además nos daba más garantías de durabilidad cuando la bebé creciera de estatura. La Shantala es más ancha y tiene una forma inclinada en la superficie, más alta por un lado que por otro.
Otra de las diferencias es que la Tummy Tub es transparente en cambio la Shantala es opaca y se comercializa en blanco y en más colores.
Los primeros minutos y primeros meses son cruciales en la vida del bebé, y soy partidaria de no alterar de manera drástica el habitat al que está acostumbrado, por ello decidí que mi bebé tuviera un periodo de transición al mundo exterior lo más parecido a los nueve meses y poco a poco ir ayudándola a adaptarse a todos los cambios del exterior y el baño no iba a ser menos.
Estas bañeras previenen los cólicos, ya que el bebé está en posición horizontal con las piernecitas dobladas, pero además de prevenirlos también nos ayudan a remediarlos combinado con otros remedios como los que os conté en mi experiencia con los cólicos del lactante.
El agua de la bañera debe estar a 37-38ºC, esta temperatura produce una sensación de los más agradable en el bebé, nuestra pequeña los primeros días se quedaba hasta dormida.
No es una bañera para frotar y enjabonar al bebé, porque los primeros meses no son necesarios los baños con jabón, ya que ni se ensucian ni sudan, salvo la zona del pañal. Es una bañera pensada para los primeros 5-6 meses del bebé, se puede utilizar hasta que el bebé este preparado para el nuevo habitat que suele coincidir con su periodo de mayor movilidad y curiosidad por lo que le rodea.

